Ya estamos en Mayo, en el mes de María, y otro curso más va llegando a su fin.
Este jueves 22 empezarán ya las celebraciones en la capilla de fin de curso en el oratorio.
Allí se reúne una clase e invitamos a la tutora y a las familias.
La experiencia es muy positiva para todos los que asistimos como colaboradores y para los niños. Se han recogido varias opiniones de los niños que asisten de diversos cursos que queremos compartir con vosotros.
Lucía Ruiz, 4º de Primaria. Yo, recomendaría el oratorio porque aparte de que aprendes más de Dos, te acercas a Él, entregándole tu corazón y enseñándole tu espíritu para que lo llene de sabiduría, pero, no es una sabiduría cualquiera, es una sabiduría especial, que la conoceréis si vais al oratorio, o mejor dicho, a "LA CASA DE DIOS".
Allí siempre seréis bienvenidos y viviréis sentimientos que no podréis vivir en otro lugar.
Roque Fernández, 5º de Primaria. Me gusta ir al oratorio porque estoy con Jesús y me libro de lo malo que me pasa, se lo cuento a Jesús y me siento mucho mejor.
Adrián Loras, 5º de Primaria. Me gusta ir al oratorio porque reflexionas con Jesús y descubro el evangelio con mis amigos del colegio.
Adrián Palacián, 5º de Primaria. Me gusta ir al oratorio porque podemos estar todos juntos y podemos estar un poco con Jesús
Isabel Buñuel, 4º de Primaria. Me gusta el oratorio porque estoy media hora con Jesús, con mis compañeros, con una profesora que nos explica cosas interesantes de Jesús y porque me siento feliz.
Alba Sánchez, 5º de Primaria. Me gusta ir al oratorio porque me reúno con Jesús, estoy con Él y reflexiono las cosas que he hecho mal.
Mikel Cormán, 4º de Primaria. Me gusta el oratorio porque puedo compartir cosas con mis amigos.
Marcos Lafuente 4º de Primaria. Me gusta el oratorio porque estamos todos juntos como una familia.
Inés Melero, 5º de Primaria. En el oratorio estamos cerca de Jesús, leemos la Biblia, abrimos el sagrario y sacamos el Pan y en Navidades damos regalos a los necesitados.
Celia Espiga, 6º de Primaria. En el oratorio estamos tranquilos y hablamos de lo que dijo o hizo Jesús en su vida. Algún día sacamos del sagrario el Pan.
